¡Hola, viajeros!
Os debía esta reseña. Igual que me debo una taza de chocolate con churros, os debía esta entrada, este libro y esta reseña. Espero que la disfrutéis muchísimo y que comentéis. Sin más dilación, ¡adelante Simon! (guiño, codazo)
Fangirl
Rainbow Rowell
Alfaguara
Fangirl es un libro que me ha confundido bastante.
La verdad es que me ha gustado, aunque la sensación general que me ha dejado ha sido fría. Quizás os esté haciendo un lío ahora mismo, pero es que ni yo lo tengo claro.
Os debía esta reseña. Igual que me debo una taza de chocolate con churros, os debía esta entrada, este libro y esta reseña. Espero que la disfrutéis muchísimo y que comentéis. Sin más dilación, ¡adelante Simon! (guiño, codazo)

Rainbow Rowell
Alfaguara
A Cath no se le da bien la vida en general, pero hay algo en lo que es realmente buena: Cath lee fanfiction desde que tiene 12 años y se ha hecho bastante famosa dentro de este particular universo. Pero ahora empieza la universidad, y eso es una historia muy diferente... Su compañera de habitación es una borde, su hermana gemela la ignora totalmente, su padre es un desastre... Cath intenta estar a la última e integrarse, pero en el fondo solo quiere encerrarse en su cuarto a escribir. ¿Está Cath preparada para vivir su vida, escribir su propia historia y abrir su corazón? ¿O se quedará atrapada en su particular mundo de ficción?
Fangirl es un libro que me ha confundido bastante.
La verdad es que me ha gustado, aunque la sensación general que me ha dejado ha sido fría. Quizás os esté haciendo un lío ahora mismo, pero es que ni yo lo tengo claro.
La historia nos sitúa en la vida de Cath, una chica totalmente fangirl de sus libros favoritos, que son Simon Snow. Simon Snow es como un paralelismo de Harry Potter: mucho éxito, mucha fama, muchos fics... Cath escribe, con colaboraciones de Wren, su hermana gemela, un fic en la red que se ha hecho muy popular. Pero le toca hacerse mayor: tiene que ir a la universidad. Wren parece adaptarse perfectamente, pero ella tiene algún que otro problema para lo que algunos denominan adaptarse.
Tenía muchísimas ganas de leer este libro: quizás me quedo corta corta cuando os digo que, fue abrir el paquete, y lanzarme hacia él. Sin contemplaciones. Nah de nah. La anterior novela de esta autora, Eleanor and Park, me dejó unas sensaciones maravillosas: como si estuviera flotando. Nunca os podría resumir lo que me hizo sentir, por eso os invito a leerla aquí. Con Fangirl, me esperaba muchísimo: me esperaba algo que me hiciera sentir identificada, algo que fuera un resumen de la vida de las verdaderas fangirls, me esperaba algo así como mi biografía (que exagerada que soy, por las alas del Ángel). Me he encontrado con una historia muy entrañable, de esas que se llevan en el corazón, pero mi parte fangirl se ha llevado un poco... un chasco. Vamos a ir por partes, que esto ya se está pareciendo a los audios que le hago a la gente en wa.
Los personajes han sido, sin duda, un punto muy fuerte de la historia que creo que estoy en la obligación de remarcar: el contraste entre Wren y Cath me ha parecido tratado de una manera magistral, al igual que su relación, como se va enfríando, como es una montaña rusa de emociones. Su relación es algo complicada: van a temporadas. Una temporada están unidas, la otra no saben nada, la otra se comportan como dos gemelas medianamente normales (ok no)... en fin.
La parte de las hermanas distendida es Wren: sin duda es una fiestera. Al ir a la universidad, se descontrola bastante. Fiestas, chicos, alcohol... es la parte más libre y más cañera de las dos. En cambio, Cath es la antítesis de su hermana. Es una chica muy reflexiva, calmada. Es antisocial (sí, como lo oís, ANTISOCIAL) y odia todo lo que no sea comer y escribir su fanfic. De las dos hermanas, me quedaría, sin duda, con Cath. Cath es la que se asemeja más a mí: aunque tampoco puedo negar que Wren tiene un punto que compensaría a Cath... son dos caras de la misma moneda... se necesitan y a la vez necesitan deshacerse la una de la otra. Es increíble como Rainbow describe todo esto, como si tuviera una hermana gemela.
Los otros personajes son demasiado achuchables: me he hecho con todos a la perfección. En especial con Levi. ¿Todos los Levi son igual de monos que los de A dos centímetros de ti y este Levi? ¿Qué tienen los Levi que dan ganas de producirlos en serio y venderlos como osos de peluche antiestrés? En fin. La compañera de Cath en el dormitorio también me ha caído muy bien, aunque al principio pensaba que era borde. Quizás es un poco borde, pero tiene su puntillo que no deja menospreciarla. Ni tan siquiera odiarla. Todos los personajes que crea Rowell, al igual que en su anterior novela, nos dejan con unas ganas impresionantes de abrazar. ¡Son perfectos y en 3D!
Otro punto que me gustaría decir es el hecho de que la autora se haya centrado en el mundo blogueril de Cath y en su fan fic, Simon Snow, ¡Adelante, Simon!. Estoy muy contenta, personalmente, de que la autora haya decidido continuar los libros y escribir uno sobre Simon Snow. Su historia con Baz, Penélope, Ágata, etc me ha recordado a Harry Potter y esa similitud tan evidente hace que te sientas muchísimo más identificado en el personaje de Cath, la escritora de fan-fics.
Por otra parte, la combinación que ha hecho Rainbow entre el duro reto de la universidad y de crecer y el hecho de que Cath sea una chica insegura y a la vez algo infantil hace de este libro el doble de interesante. Cath se tiene que hacer mayor con la universidad... es un duro reto que debe afrontar, que la novela afronta.
No hace falta decir que lo recomiendo con creces. Sin embargo, ahora tengo que decir que he encontrado dos puntos negativos a esta historia.
1) El ritmo. Había partes en las que me encantaba: rápido y perfecto. Pero había momentos de la lectura en la que me aburría. En la que me quedaba encallada. En la que continuar se me hacía algo pesado. Estas partes se alternan con otras más ligeras. Pero la sensación general que me ha dejado es que ha sido algo lento. Eleanor and Park no me dejó así.
2) Después, ha habido el problema de que me ponía nerviosa cuando Cath se bloqueaba al escribir. Eso no me gustaba nada: es lo único que he encontrado irreal. Cuando Cath no puede escribir era como un: ¡escribe! Aunque fuera cualquier cosa. No sé, me ha puesto bastante nerviosa.
La sensación extraña que me ha dejado ha sido por culpa de las expectativas: prometo no volver a confiar en ellas. Siempre nos juegan malas pasadas a los lectores como nosotros..
Y que decir, por último, de la prosa de esta autora. Que es maravillosa, sin igual. Su manera de describir y de hablar es tan poética: se me mezcla una gran adaptación de los personajes a la época con un poeta reprimido en el interior. Su pluma es amena, refrescante, intrigante y extremadamente romántica. Necesitaría cuatro toneladas de aire para poder seguir describiendo a esta magnífica autora.
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A veces, tomas la mano de alguien tan solo para comprobar que sigues vivo, y que otro ser humano está allí contigo para dar fe de ello.
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Jope, que geniales que son algunos fan arts *-* |
La parte de las hermanas distendida es Wren: sin duda es una fiestera. Al ir a la universidad, se descontrola bastante. Fiestas, chicos, alcohol... es la parte más libre y más cañera de las dos. En cambio, Cath es la antítesis de su hermana. Es una chica muy reflexiva, calmada. Es antisocial (sí, como lo oís, ANTISOCIAL) y odia todo lo que no sea comer y escribir su fanfic. De las dos hermanas, me quedaría, sin duda, con Cath. Cath es la que se asemeja más a mí: aunque tampoco puedo negar que Wren tiene un punto que compensaría a Cath... son dos caras de la misma moneda... se necesitan y a la vez necesitan deshacerse la una de la otra. Es increíble como Rainbow describe todo esto, como si tuviera una hermana gemela.
Los otros personajes son demasiado achuchables: me he hecho con todos a la perfección. En especial con Levi. ¿Todos los Levi son igual de monos que los de A dos centímetros de ti y este Levi? ¿Qué tienen los Levi que dan ganas de producirlos en serio y venderlos como osos de peluche antiestrés? En fin. La compañera de Cath en el dormitorio también me ha caído muy bien, aunque al principio pensaba que era borde. Quizás es un poco borde, pero tiene su puntillo que no deja menospreciarla. Ni tan siquiera odiarla. Todos los personajes que crea Rowell, al igual que en su anterior novela, nos dejan con unas ganas impresionantes de abrazar. ¡Son perfectos y en 3D!
-¿Qué tenemos en común?-Nos gustamos -afirmó él-. ¿Te parece poco?
Otro punto que me gustaría decir es el hecho de que la autora se haya centrado en el mundo blogueril de Cath y en su fan fic, Simon Snow, ¡Adelante, Simon!. Estoy muy contenta, personalmente, de que la autora haya decidido continuar los libros y escribir uno sobre Simon Snow. Su historia con Baz, Penélope, Ágata, etc me ha recordado a Harry Potter y esa similitud tan evidente hace que te sientas muchísimo más identificado en el personaje de Cath, la escritora de fan-fics.
Por otra parte, la combinación que ha hecho Rainbow entre el duro reto de la universidad y de crecer y el hecho de que Cath sea una chica insegura y a la vez algo infantil hace de este libro el doble de interesante. Cath se tiene que hacer mayor con la universidad... es un duro reto que debe afrontar, que la novela afronta.
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Ediciones bonitas en 3, 2, 1... edición perfecta. |
1) El ritmo. Había partes en las que me encantaba: rápido y perfecto. Pero había momentos de la lectura en la que me aburría. En la que me quedaba encallada. En la que continuar se me hacía algo pesado. Estas partes se alternan con otras más ligeras. Pero la sensación general que me ha dejado es que ha sido algo lento. Eleanor and Park no me dejó así.
2) Después, ha habido el problema de que me ponía nerviosa cuando Cath se bloqueaba al escribir. Eso no me gustaba nada: es lo único que he encontrado irreal. Cuando Cath no puede escribir era como un: ¡escribe! Aunque fuera cualquier cosa. No sé, me ha puesto bastante nerviosa.
La sensación extraña que me ha dejado ha sido por culpa de las expectativas: prometo no volver a confiar en ellas. Siempre nos juegan malas pasadas a los lectores como nosotros..
Y me gustaría que ese beso hubiera sido el principio de algo. No el final.
Y que decir, por último, de la prosa de esta autora. Que es maravillosa, sin igual. Su manera de describir y de hablar es tan poética: se me mezcla una gran adaptación de los personajes a la época con un poeta reprimido en el interior. Su pluma es amena, refrescante, intrigante y extremadamente romántica. Necesitaría cuatro toneladas de aire para poder seguir describiendo a esta magnífica autora.
Por lo demás, sin embargo, es un gran libro que recomiendo encarecidamente. Si el ritmo no es tu prioridad y no te bloqueas fácilmente con los personajes, este es tu libro. No puedo hacer nada más que decir que probéis con esta autora, porque no tiene desperdicio. Cada una de sus páginas son maravillosas, poéticas y sarcásticas. El cóctel de humor, lágrimas y sonrisas que necesitas para amar un libro y que se convierta en uno de tus favoritos. Leed Fangirl, por favor.

Eso es todo amigos. Mi infancia here, pls.
Decidme que os ha parecido la reseña y todo. Espero que os haya gustado y que comentéis. Así mismo, estoy intrigada... ¿vais a leer el libro? ¿ya lo habéis hecho? ¿hakuna matata o matata hakuma? Ídia, por favor, no hagas esto tan humiliante.
Tendréis noticias de mis próximos viajes. Temblad.
La vaca Milka se muere de terror.
